Información básica

Parte de la progenie de uno de los grandes dragones que gobiernan la Cumbre de Zagorian, Ylzrir el portador del orden, y de una dragona extranjera de la cual los bardos han cantado más de una leyenda, Tävna la corruptora de mundos. Esta última abandonó el lugar poco después de incubar los huevos de los cuales Vaerion y sus hermanos nacerían, entorno al año 447 de la Dinastía Brünait. Esto nunca fue un problema como tal ya que es costumbre en los dragones de estas tierras buscarse la vida desde una vez que nacen.

Desde joven se vio envuelto en la lucha por el más apto como era normal allí, cazando peligrosas presas a la vez que se cuidaba del resto de dragones para no encontrar un final prematuro. Las peleas eran el pan de cada día así que era normal para algunos incluso formar pequeños grupos con tal de maximizar la supervivencia incluso si significaba tener que repartir la presa.

De los ocho hermanos solo sobrevivieron tres contándole a él, restando su hermana mayor y primera en nacer así como su hermano menor y quinto en nacer. Para entonces ya había alcanzado la edad suficiente para mantenerse a salvo de la gran mayoría de peligros que allí habitaban, fue entonces, cuando pudo comenzar a relajarse, que desarrolló sus hábitos perezosos mientras que sus dos hermanos también encontraban sus propios caminos.

Por norma general esto no hubiese cambiado mucho y Vaerion habría permanecido viviendo en aquel lugar, pero tras la invasión de la familia Brünait él mismo fue uno de los primeros en lanzarse contra los asentamientos humanos al haber sido estos quien habían perturbado su descanso. Tras una semana de incesantes ataques a los asentamientos durante "la semana oscura", él y su hermana se unieron al grupo que atacó el principal asentamiento y donde residía la familia Brünait. Posiblemente este fue su primer gran error ya que tras poner fin a aquella larga dinastía los dragones decidieron erigir su propio y primer asentamiento fuera de la Cumbre de Zagorian, resultando él elegido como candidato a líder debido a que fue el que más había destacado durante el ataque así como la insistencia de su hermana frente a los demás para elegirlo a él. Su segundo gran error fue terminar cediendo a esto al pensar que no habría que hacer mucho o no duraría demasiado, pues el único propósito de todo aquello había sido prevenir ataques a futuro con tal de poder descansar tranquilamente. Sin saberlo acababa de meterse hasta el cuello en el camino que le llevaría a ser emperador.

Durante la construcción de aquel asentamiento invitó a su otro hermano a participar también pero este último siempre prefirió mantenerse en el interior de aquella zona montañosa. Así que tras separarse de este emprendió su nuevo camino al mando de aquel asentamiento el cual, por supuesto, no tardó en verse envuelto en las trifulcas y guerras continuas del continente. De esta forma comenzó la conquista que no tardaría en crear un pequeño reino conocido como Larazan al cabo de un par de décadas. Fue entonces cuando Vaerion fue coronado rey y recibió un apellido como era costumbre en los regentes, después de todo ninguno de los dragones que allí habitaba adquiría uno al nacer. Para este se usó una antigua palabra que significa "proveniente de la roca", "creado a partir de la roca" y "tallado en la roca" entre otros, haciendo reflejo de la afición de este dragón por petrificar a sus mayores adversarios.

Con el paso del tiempo y las nuevas adquisiciones de territorios el trabajo se acumulaba y cada vez habían más problemas que resolver, Por ello un día se topó con una idea que cambiaría el funcionamiento del continente: implementar una meritocracia. De esta forma fue como Vaerion comenzó a ofrecer mejores condiciones a aquellos que más trabajaban y más logros conseguían mientras que aquellos que no hacían nada eran echados de sus cargos incluso si se trataban de nobles. Gracias a esto pudo forjar un sistema con empleados eficientes y capaces que lo liberaban de una gran carga de trabajo a la par que el reino se seguía expandiendo. No mucho más tarde es cuando finalmente pasaría a ser conocido como el Imperio de Larazan, logrando la hazaña de unificar todo el continente por primera vez en la historia.

A día de hoy mantiene su cargo aunque el sistema está tan arraigado y pulido que puede permitirse gozar de tiempo libre sin preocupaciones.